







Desde el bloque Vamos con Todos, los concejales Lorena Alan y Julián Algañaras expresaronsu preocupación ante "el grave estado de abandono de la Plaza Stefi, en el barrio Mi Bandera, y la falta de respuestas concretas por parte del Municipio de Viedma".


Los ediles señalaron que "la plaza —que lleva el nombre de una niña y representa un espacio de memoria, juego y encuentro— se encuentra en condiciones alarmantes: cables pelados, juegos rotos, bancos deteriorados y un evidente abandono general. Lo más grave es que está rodeada por instituciones educativas como el Jardín N° 13, el Jardín N° 27 y la Escuela N° 276, donde todos los días cientos de niños y niñas transitan el espacio, expuestos a riesgos que podrían evitarse con una mínima intervención municipal".
Afirmaron que "junto a la mamá de Stefi y a los vecinos del barrio venimos realizando reclamos desde hace meses, tanto de manera formal como pública. La familia presentó notas al Municipio en diciembre del año pasado, y a casi un año de esos pedidos la plaza sigue en el mismo estado de abandono. Desde nuestro bloque también hemos elevado los reclamos institucionales y tampoco hemos recibido respuestas ni acciones concretas".
"Resulta preocupante que la jefa de Gabinete, María Eugenia Serra, y Mauro Campisi, integrante del área de Servicios Públicos de la Municipalidad de Viedma, elijan responder a través de los medios de comunicación, minimizando los reclamos y ofreciendo versiones que se contradicen entre sí. Dudamos sinceramente que quienes hoy aseguran “conocer la situación” hayan recorrido el lugar, porque quien camina la Plaza Stefi no puede desconocer su deterioro, ni el riesgo que representa para los chicos y las familias del barrio", expresaron.
También indicaron que "el uso excesivo de los medios oficiales para justificar la inacción refleja una gestión más preocupada por la comunicación que por la gestión. Les pedimos a los funcionarios que usen ese tiempo para ocuparse, que vayan al barrio, hablen con los vecinos y con la familia de Stefi, que desde hace casi un año espera una respuesta. La mamá de Stefi y los vecinos no les conocen la cara: eso, por sí solo, demuestra la distancia entre los funcionarios y la realidad que deberían atender".



































