







En diálogo con FM DE LA COSTA, Ariel Abeiro, socio del Jockey Club de Viedma y una de las personas que utiliza las instalaciones del hipódromo local para el cuidado de caballos, se refirió a la difícil situación que atraviesa el ... y volvió a responsabilizar a Roberto Vargas, secretario general de los Trabajadores Gastronómicos (UTHGRA) en la región, por el mal estado.
Se debe a que es el propio Vargas quien preside la comisión del hipódromo, sin embargo Abeiro expresó que el sindicalista nunca se habría hecho cargo de la parte hípica.
"El hipódromo es mi segunda casa, se inauguró en el 2001, luego cayó y sobre el 2015 se reactivó de nuevo. Funcionó por tres años más, después hubo cambio de comisión (la misma que sigue hoy) y es un abandono total. Creo que se hicieron tres reuniones hípicas desde el 2019/20 a la actualidad", comentó Abeiro.
En ese sentido, advirtió que "no hay funcionamiento, lo único que está funcionando es la confitería. Lo que pasa en el lugar es una lástima, es el único predio que tiene la provincia con semejantes instalaciones, al ser una réplica de Palermo".
Consideró que "está todo muy abandonado, la gente que está ahí hace un esfuerzo para mantenerlo".
En cuanto a la situación de Vargas, Abeiro sostuvo que "esta persona nunca se presentó, la única vez que lo hizo fue cuando asumió como presidente, y después nunca más".
No obstante ello, manifestó que "el predio está recuperable, pero es muy grande y no hay mantenimiento. La cancha se está llenando de yuyos. En la actualidad, deben haber unos 30 caballos, y al no haber carreras ni funcionamiento, es una lástima".
Agregó en esa línea que "lo ideal es que venga gente nueva que tenga ganas de levantar esto, que no está muy lejos para hacerlo, y hay gente interesada. Este hombre, al no interesarle, debería dar un paso al costado. Lo único que le interesa es la confitería".
Por último, expuso que "es una pena que se esté desmoronando y cayendo todo, es una lástima muy grande. Esto se creó junto al autódromo, y ese lugar está funcionando, pero el hipódromo no".





































