Algañaras votó en contra del Presupuesto 2026 y del endeudamiento: “No vamos a acompañar una gestión que no cumple, no informa y no dialoga”

El concejal de Vamos con Todos, Julián Algañaras, votó en contra del Presupuesto Municipal 2026 y del nuevo endeudamiento solicitado por el Ejecutivo. Señaló que su decisión es consecuencia de un 2025 sin diálogo, sin información suficiente y sin cumplimiento de los compromisos asumidos con los vecinos.

Algañaras advirtió que varias de las obras que el Municipio presenta como prioritarias para 2026 ya estaban incluidas en el Presupuesto 2025, en especial las surgidas de los presupuestos participativos de las Juntas Vecinales. Sin embargo, al revisar las planillas del ejecutado, no registran avance ni un solo peso invertido.

“Las planillas del presupuesto participativo se repiten año tras año para darle contenido al presupuesto, pero esas obras no se ejecutan. Y cuando los funcionarios fueron consultados en comisión, no pudieron dar respuesta”, indicó.

Respecto al endeudamiento destinado a nuevas obras de pavimentación, el concejal también votó en contra por la falta de información precisa y los antecedentes de incumplimiento. Recordó que en 2022 el Ejecutivo anunció un plan de 150 cuadras de asfalto, acompañado por el Concejo, y que al día de hoy continúa inconcluso. Existen ordenanzas aprobadas que aún no se ejecutaron, mientras numerosos vecinos siguen esperando definiciones.

“El Ejecutivo no informó qué calles se realizaron, cuáles quedaron pendientes ni las razones. Si no cumplieron con el plan anterior, no hay razones para creer que cumplirán ahora”, sostuvo.

Además, Algañaras señaló un hecho que generó fuerte malestar en los barrios: mientras cientos de familias esperaban que se respetara el listado original de pavimentación, el Municipio asfaltó una calle ciega vinculada a un exfuncionario municipal, dejando afuera a vecinos que sí estaban incluidos en el plan.

“Un gobierno que distribuye obras con criterios discrecionales no puede pedir acompañamiento político”, afirmó.

El concejal también cuestionó el funcionamiento institucional del Municipio. Señaló que los pedidos de informes tardan en ser respondidos y que, cuando llegan, en muchos casos son ambiguos, incompletos o no contestan lo solicitado. Incluso —advirtió— algunos funcionarios reaccionan con enojo cuando se les pide información, en vez de cumplir con su obligación de transparentar su gestión.

Un caso grave —recordó— fue la emergencia alimentaria, en la que el Concejo debió acudir al Fiscal Municipal para obtener información básica ante la falta de respuesta oficial.

Finalmente, Algañaras sostuvo que su voto negativo es coherente con la responsabilidad de garantizar un uso transparente de los recursos públicos y con la obligación de exigir que las obras comprometidas se cumplan. “La ciudad necesita planificación real, información clara y decisiones que respondan a las prioridades de los vecinos. Nada de eso estuvo presente en este presupuesto ni en el pedido de endeudamiento”, concluyó.