La Municipalidad de Viedma informa que, con el objetivo de mejorar la accesibilidad y la transitabilidad de los espacios públicos y semi públicos, se llevará a cabo un plan de trabajo integral de adecuación de veredas en toda la ciudad.
Tras realizar un exhaustivo relevamiento, se iniciará un trabajo en etapas para instar a los frentistas a reparar, reconstruir y/o adecuar sus veredas, con el fin de obtener un resultado colectivo y armonioso.
Este plan tiene como finalidad identificar y registrar el estado actual de las veredas, y solicitar a los vecinos frentistas, que procedan a realizar las reparaciones necesarias para garantizar la seguridad y accesibilidad de todos los ciudadanos.
El trabajo comenzará en el área céntrica, específicamente en la zona delimitada por las calles Costanera y Roca-Alem, y entre Guido y Las Heras.
En este sentido, se procederá al registro de los inmuebles dentro del área mencionada que no cuenten con veredas en condiciones.
A los propietarios de dichos inmuebles se les notificará sobre la deficiencia detectada, otorgándoles un plazo razonable para realizar las reparaciones correspondientes. Vencido este plazo, se aplicarán las penalidades previstas por la normativa vigente.
Es importante señalar que las penalidades se aplicarán en términos económicos, pero no tienen un fin recaudatorio, sino que buscan contribuir a una ciudad más accesible e inclusiva para todos.
Se recuerda que la responsabilidad del mantenimiento adecuado de las veredas le corresponde a cada propietario, con el fin de garantizar la seguridad de los peatones, incluyendo a las personas con discapacidad.
Y en caso de inconvenientes con el arbolado urbano, consultar en el área de Espacios Verdes del Municipio.
Todo nace con el trabajo de una concejal
Una concejal viedmense reflotó el año pasado una vieja ordenanza vigente de hace más de 35 años y que actualmente no se está cumpliendo.
Se trata de la edil de Cambia Río Negro, María Andría, quien comenzó a trabajar por el mantenimiento y la construcción de las veredas. La normativa que comenzó a abordar data del 1987 y, según precisó en setiembre pasado "el municipio no está actuando como órgano de control".
En diálogo con FM DE LA COSTA, Andría señaló que "planteamos la cuestión de las veredas por una preocupación de muchos vecinos que se acercan al Concejo Deliberante a consultar y a comentarnos el estado de las mismas, que además lo vemos todo".
Explicó que "la ordenanza plantea que la responsabilidad de la construcción y mantenimiento de las veredas es responsabilidad del frentista. Nosotros decimos que esto es real, pero el poder de control lo tiene el municipio y lo que tenemos que hacer es controlar que esta ordenanza se cumpla".
Asimismo, indicó que "planteamos que finalmente la responsabilidad del espacio público es municipal. Cualquier cosa que pasa en la vereda, por ejemplo una caída, tiene responsabilidad de la municipalidad. Muchas veredas no son privadas, hay muchas en donde las del Estado están destrozadas".
Detalló que "la normativa inclusive plantea intimar no sólo al frentista a que realice los trabajos necesarios para que la vereda esté en condiciones, sino que plantea que si no lo hace, el municipio podría tomar la decisión de arreglarla y cobrársela al frentista".
Indicó luego que "el Estado debe comenzar dando el ejemplo, que comience haciendo que las veredas municipales y provinciales estén en condiciones".
Por último, sostuvo que "entendemos que es un momento difícil, pero Argentina siempre lo es, y con esa excusa nunca avanzamos en nada. Es momento de comenzar a pensar en alternativas".
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