





La Asociación Trabajadores del Estado (ATE) denuncia la intención del Gobierno de reducir al PAMI a su mínima expresión, para luego privatizarla. Por eso convoca para este jueves a una protesta en la sede central en General Roca y prepara una batería de medidas para la semana que viene.


“El Gobierno pretende destruir la obra social más grande de Latinoamérica y la única manera de evitarlo. es estando en la calle”, dijo Romeo Aguiar, secretario gremial de ATE y delegado en PAMI.
El sindicato denunció que un paciente oncológico tiene que esperar 30 días para que se evalúe su medicación y luego 15 días más hasta ser entregada. Advirtió que las prótesis (sillas de ruedas, bastones, andadores, audífonos) demoran más de un año. Quienes optan por el reintegro, deben esperar 8 meses.
Desde los últimos meses, PAMI brinda prestaciones médicas y sociales mínimas. El desmantelamiento es prácticamente total y pone en riesgo el funcionamiento de la obra social en toda la provincia.
“Información a la que hemos accedido revela una transferencia multimillonaria de recursos del PAMI al ámbito privado y la misma no se traduce en mayor cantidad y calidad de prestaciones”, agregó Aguiar. “Por eso exigimos que se investigue el vínculo que tienen las autoridades de la obra social con las corporaciones médicas”.
ATE anticipó que ante la falta de respuestas acudirá a medidas de fuerza más extremas, con acampes que afectarán los servicios.

















