Viedma y El Cóndor sufrieron el lunes la llegada de un fuerte temporal de viento que generó voladuras de techos y muchas más complicaciones en distintos puntos del ejido.
Quienes también la pasaron muy mal fueron los guardavidas de la villa balnearia, lugar en donde las inclemencias climáticas afectaron los refugios de los guardavidas.
Desde la delegación viedmense del gremio SUGARA consideraron que no ocurrió una tragedia de milagro.
Precisamente, lo expresó a FM DE LA COSTA Leandro Saldaña, titular de la delegación local de SUGARA.
"Fue un caos, estamos agradecidos de que no haya terminado en una tragedia. Los compañeros de Playa Central y Cailotto la pasaron muy mal con los refugios. Son contenedores, uno se tiene que imaginar lo que pesan. Cuando se colocaron a principio de temporada, vimos que estaban mal colocados. En los videos se ve que ni siquiera estaban sujetos", expresó.
Saldaña aportó que "fue una cuestión climática muy grave. En Cailotto, el contenedor quedó contenido por el mangrullo, pero casi aplasta a un compañero, y a otro casi le agarra la pierna".
Asimismo, precisó que "el de Playa Central quedó inclinado hacia atrás, mientras que el de Cailotto quedó hacia adelante. Gracias a los compañeros no se dio vuelta del todo".
Por último, Saldaña indicó que "hoy lo estamos contando como una experiencia fea, pero podría haber terminado peor".
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