El paro que la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) realiza este miércoles en los organismos nacionales, provinciales y municipales arrancó con altísima adhesión y un acampe frente a la sede de la Secretaría de Trabajo de la Nación en General Roca (Tucumán y Roca). Sólo se atienden guardias en hospitales, Desarrollo Social y SeNAF.
La medida es contra el intento del gobierno de Milei de congelar el salario en la administración pública y el posible despido de 65.000 trabajadores cuyos contratos vencen a fin de mes. Además, el sindicato exige a todos los diputados nacionales rionegrinos que rechacen el veto presidencial al aumento de las jubilaciones.
En Bariloche a las 10.30 se prevé la realización de una conferencia de prensa en la sede del sindicato Unter (Elflein 735) y una movilización desde Onelli y Moreno a las 11 hacia el Centro Cívico.
“Los legisladores de Río Negro fueron elegidos para defender los intereses del pueblo, no para ajustarlo y reasignar plata a la compra de armas y la inteligencia secreta”, dijo Rodrigo Vicente, secretario general de ATE.
“El paro de ATE es contundente porque tiene legitimidad: la situación social empeora, no se vislumbra una mejora y la gente empieza a enojarse”, agregó.
Durante la última paritaria, ATE rechazó el 2% de aumento para septiembre y 1% para octubre ofertado por el Gobierno y repudió cualquier posibilidad de que los salarios se mantengan congelados hasta fin de año.