Día Nacional del Mate: la infusión que une a los argentinos, hoy más vigente que nunca
Cada 30 de noviembre, el país celebra su bebida insignia. Más del 90% de los hogares argentinos consumen esta infusión, que rinde homenaje al caudillo guaraní Andrés Guacurarí y Artigas, un símbolo de identidad y resistencia.
En un país donde las tradiciones se defienden con pasión, pocas son tan transversales y arraigadas como el mate. Hoy, 30 de noviembre, Argentina conmemora el Día Nacional del Mate, una fecha instituida por la Ley 27.117 en 2015 para celebrar la infusión que es, sin dudas, el símbolo de la argentinidad por excelencia.
La jornada no solo es un recordatorio del valor cultural del mate, sino también una oportunidad para reflexionar sobre su rol social y económico en la vida cotidiana de millones de personas.
Un homenaje a "Andresito"
La elección de la fecha no es casual. El 30 de noviembre se celebra el natalicio de Andrés Guacurarí y Artigas, conocido popularmente como "Andresito". Fue el único gobernador indígena de la historia argentina y un militar y caudillo federal de gran relevancia en la provincia de Misiones a principios del siglo XIX.
Guacurarí fue un ferviente impulsor de la producción y distribución de la yerba mate en la región, reconociendo su importancia económica y cultural. Su figura, ligada a la defensa del territorio y los valores federales, otorga a la celebración un profundo sentido histórico y de identidad regional.
Cifras de una pasión nacional
Los datos no mienten: el mate es una constante en la mesa argentina. Según cifras del Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM), la infusión está presente en más del 90% de los hogares del país.
El consumo promedio por habitante supera los 6 kilogramos de yerba al año, una cifra que demuestra la fidelidad del público. De hecho, se estima que en Argentina se consumen más litros de mate por persona anualmente que de agua embotellada.
Más allá de los números, el mate representa un ritual, un momento de pausa, charla y, fundamentalmente, de compañerismo. Si bien la pandemia de COVID-19 alteró temporalmente la costumbre de compartir la misma bombilla por razones sanitarias, el ritual se adaptó y la esencia de la ronda sigue intacta, simbolizando la unión familiar y social.
De la tradición guaraní a la identidad moderna
El origen del mate se remonta a los pueblos guaraníes, quienes utilizaban las hojas del árbol Ilex paraguariensis como bebida energizante, objeto de culto e incluso moneda de cambio. Los conquistadores españoles adoptaron rápidamente la costumbre, y con el tiempo, el mate se expandió por todo el Virreinato del Río de la Plata.
Hoy, la tradición se mantiene viva. Cebadores expertos y principiantes honran la técnica ancestral, desde la elección de la yerba y el mate adecuado hasta la temperatura justa del agua (idealmente entre 75°C y 80°C).
En este Día Nacional del Mate, se celebra más que una bebida: se festeja la cultura de la hospitalidad, el arraigo a la tierra y ese momento único e intransferible que se genera alrededor de la pava y el mate.