El arte efímero de la bandera en El Cóndor: Una charla con Lidia Gómez
Lidia Rosana Gómez, artista de San Antonio Oeste, visitó el balneario El Cóndor el pasado 20 de junio, Día de la Bandera, no solo para conocer la costa rionegrina, sino para realizar una impactante intervención artística efímera en la arena junto a Gabriela Henkel, oriunda de Las Grutas.
Gómez conversó como Radio El Cóndor, donde mencionó que si bien hizo frío, la ausencia de viento les permitió trabajar cómodamente en la playa: "La verdad es que es una experiencia re linda, bueno, nosotros cuando estamos ahí tan concentradas en lo que tanto nos gusta, ¿no? Es como que el frío pasa desapercibido, el calor, lo que sea, y se disfruta muchísimo."
Lidia destacó la calidad de la arena del balneario: "Nos gustó mucho la arena del Cóndor, muy suave para trabajar, la textura, la verdad que la pasamos muy linda."
El Origen del Arte Efímero: Pasión y Necesidad
Lidia, quien se crio en la costa, siempre se sintió atraída por el arte en la arena. Su incursión en el arte efímero se consolidó tras conocer a un artista en una bienal en Perú, lo que la llevó a participar en un evento en Uruguay. "Es todo un mundo que por ahí se desconoce y la verdad que tiene como un montón de cuestiones que son muy atrayentes para los curiosos de lo efímero," explicó.
La escultura y el dibujo a gran escala, junto con la sorpresa de ver la imagen desde un dron, fueron aspectos que la enamoraron de esta disciplina. Además, la necesidad de crear constantemente en un lugar con pocas opciones para adquirir materiales artísticos la impulsó a buscar alternativas. "Soy ansiosa y necesito estar haciendo constantemente y es como que, bueno, no tengo un bastidor, ¿qué hago? Atajo una piedra, voy, dibujo la arena y todo así," relató.
Un Camino de Resistencia Artística
Con unos 15 años de trayectoria en el arte, Lidia compartió su particular camino. Si bien su padre desaprobó su deseo de estudiar arte al terminar el secundario, instándola a seguir una carrera más "redituable", Lidia nunca dejó de lado su vocación. Tras estudiar Despachante de Aduanas y Comercio Internacional, y luego de desempeñarse como docente, decidió dedicarse íntegramente al arte.
"Dejé todo y no fue fácil, obviamente, porque me dediqué en un modo... O sea, era la nada misma en un principio," confesó Lidia. Sin embargo, con el apoyo de su familia, se lanzó de lleno a su pasión. Respecto a si vive del arte, Lidia reconoció las dificultades actuales: "Hoy día, con cómo está todo, se complica." Aunque hubo un período de estabilidad, la pandemia afectó significativamente al sector, obligándolos a "volver a empezar muchas veces."
La Obra en la Arena: Símbolos, Historia y Pasión
La intervención en la playa del Cóndor no fue solo la representación de la bandera. "En un principio decíamos con Gaby, siempre charlamos mucho las ideas que plasmamos en la arena juntas. El tema de plasmar la bandera, solamente hacerla con los más detalles posibles para que quede la bandera, darle protagonismo al símbolo," explicó Lidia.
Pero la obra fue más allá, incorporando elementos populares: las tres estrellas del fútbol, la pasión por los colores patrios, las Islas Malvinas y sus héroes. "Quisimos hacer toda esta cuestión de los de siempre. Todos los ciudadanos argentinos que mamaron esta patria. Representados tanto desde la historia, todo lo que pasó con nuestras Islas y el hoy. Así que todos apasionados por nuestra bandera," detalló. La ubicación, casi al pie del Memorial de Malvinas, añadió un significado aún más profundo a la creación.
A pesar de las modificaciones en la playa debido a una sudestada, que las obligó a ajustar la ubicación, la obra logró ocupar un espacio de aproximadamente mil metros cuadrados, dejando una huella imponente.
La Magia del Arte que Solo se Ve Desde el Cielo
Uno de los aspectos más fascinantes del arte efímero en la arena es la imposibilidad de ver la obra terminada desde el suelo. "La creación, la obra pasa por tu cabeza. Está en tu mente. Y la vas transmitiendo segmento por segmento en un espacio gigante de playa. Y no la ves la obra," comentó Lidia. La revelación llega con las imágenes aéreas. "Eso es lo que causa también un éxtasis superior a pintar un cuadro. Que vas viendo todo el proceso. Y lo vas viendo cómo lo vas desarrollando."
"En este tipo de intervenciones es como la vida misma del artista. Jugársela y a ver tu obra cómo va a quedar después. Y ver las imágenes en lo alto es la sorpresa más linda," añadió, destacando el rol fundamental de la colaboración, como la de Carlos de Fly Producciones, quien facilitó las imágenes de dron.
La Dupla y el Futuro en El Cóndor
La dupla de Lidia Gómez y Gabriela Henkel, aunque "efímera" como sus obras, se consolida en cada proyecto. Lidia, quien comenzó dibujando sola, ha colaborado con otros artistas a lo largo de los años. Su conexión con Gaby, quien preside la ONG "Crianza Sana" dedicada a los derechos de los niños, fortaleció esta unión creativa.
"Somos la dupla del dibujo efímero sobre las arenas," afirmó Lidia, quien se mostró encantada con la arena de El Cóndor y manifestó su deseo de volver. "Queremos volver obviamente. Y bueno, a disposición para, no sé, lo que surja que se pueda organizar."
La posibilidad de futuras colaboraciones con artistas locales de la comarca, en particular aquellos que trabajan con esculturas en la piedra arcillosa del acantilado, abre la puerta a nuevas jornadas artísticas en El Cóndor, idealmente en primavera, para que más personas puedan sumarse a disfrutar de estas creaciones únicas.
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