El PRO y Primero Río Negro rechazan proyecto para que la Nación actualice los presupuestos universitarios

La Comisión de Planificación, Asuntos Económicos y Turismo dio dictamen favorable hace pocos días a un proyecto de comunicación al Poder Ejecutivo y al Congreso nacional, a fin de que de manera urgente se destine el presupuesto necesario para el funcionamiento y desarrollo de las universidades nacionales con asiento en Río Negro.

La iniciativa, que pertenece a José Luis Berros (Vamos con Todos), contó con el respaldo de la mayoría de los integrantes de esa comisión. La votaron en contra los representantes del PRO (Claudio Doctorovich y Juan Murillo) y de Primero Río Negro (Elba Mansilla).

En los fundamentos el parlamentario remarca que “la Constitución de nuestro país determina que la educación es un derecho humano fundamental, de carácter personal y social, y por ello el Estado Nacional tiene la responsabilidad de proveer los medios para garantizar una educación integral, permanente, gratuita y de calidad, que profundice el ejercicio pleno de ese derecho y la igualdad real de oportunidades a todos/as los/as habitantes de la Nación”.

Añade que en los últimos años “hubo un aumento significativo en la demanda de educación superior, ante ello con una mirada federal el Gobierno Nacional impulsó la creación de más universidades públicas facilitando a un mayor número de estudiantes el acceso a una educación de calidad”.

Es en ese punto cuando Berros destaca que “el gobierno de Milei, así como lo había dicho en campaña a pesar que en aquel momento fueron pocos los que creyeron que iba a concretar semejante desatino, ya tiene en la mira a todo el complejo de educación, ciencia y técnica”.

“Así empezó el desfinanciamiento de las universidades nacionales, el achique y ajuste, o simplemente su desaparición, de organismos públicos (CONICET, el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación y la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica). Tiene una clara mirada privatista”, subrayó.

Mencionó que según señalan los rectores universitarios más especializados “el presupuesto universitario tiene dos grandes rubros: lo que se usa para pagar salarios, que en las distintas universidades equivale a entre un 65% (cuando tienen una economía ordenada) y un 90% del total. El resto, lo que queda por fuera de los salarios y está estipulado en el proyecto de la Ley de Presupuesto Nacional, es para funcionamiento. Eso incluye todo lo que hay que abonar, desde alquiler, equipamiento, laboratorios, computadoras o muebles, hasta becas, contratos, servicios".

Consideró que “con la decisión de Milei de prorrogar el presupuesto 2023, sumado a las limitaciones del DNU y la denominada ‘Ley Ómnibus’, las universidades nacionales enfrentaran problemas de funcionamiento”.

“Es evidente que para el gobierno de Milei ni las universidades ni el sistema científico tienen valor alguno, al contrario, lo ven como un gasto innecesario. Para nosotros, a diferencia, las universidades públicas desempeñan un papel fundamental en el desarrollo económico y social de un país”, concluyó.